El Cruce de la Pampa, de Rafael Bruza, es una obra clave de la dramaturgia argentina y santafesina. Relata el encuentro inquietante entre dos desconocidos en la inmensidad desolada de la pampa, una situación cargada de tensión, misterio y peso existencial.

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Esta nueva versión propone una mirada contemporánea, física y poética del texto original. Inspirada en el mimo corporal dramático, sitúa al cuerpo del actor como eje del relato, en diálogo con un escenario casi vacío. El teatro de sombras y un diseño sonoro envolvente transforman el espacio escénico en un paisaje visual y sensorial, donde la pampa argentina se convierte en un tercer personaje silencioso pero presente.

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La puesta reflexiona sobre la soledad, el miedo al deseo y la rutina como refugio estéril. Invita al espectador a un viaje interior: a los cruces cotidianos, a las decisiones inciertas y a la necesidad profunda de detenerse y habitar el presente. Una estética minimalista, atravesada por capas visuales y sonoras, da vida a esta metáfora atemporal.